lunes, 29 de abril de 2013

“NACEMOS MUERTOS”: una novela (negrísima) de Ana Colchero (¡APOYA EL CROWDFUNDING!)



¿Qué puedes hacer cuando lo peor que te puede pasar le sucede a tu familia?
Esa es, desde mi punto de vista, la premisa de la que parte la nueva novela de Ana Colchero, autora mexicana (y también una conocida y reconocida actriz) que ya le sirvió al público una durísima historia sobre los desmanes y vicios del poder político en Entre dos fuegos (Planeta, 2006), y más recientemente, una distopía futurista demasiado cercana a los tiempos que corren en Los hijos del tiempo (La Esfera de los Libros, 2012; y en México Suma de Letras, 2012).
Nacemos muertos no es una de esas “narconovelas” (poco menos que hagiografías de personajes del Narco mexicano) que últimamente aparecen como churros en las estanterías de los grandes almacenes de la patria de Zapata, ni tampoco una crónica de la guerra contra el crimen organizado (organizado desde las más altas esferas y comandado por un país cuyo nombre empieza por “U” y termina por “A”). Nacemos muertos es, por el contrario, una historia concreta —pero absolutamente extrapolable— sobre las víctimas de la atroz violencia que día sí, día también, se desata sobre ese bello y, para mí, casi incomprensible país.
Podremos decir que se trata de un thriller (porque lo es), y que es una novela negra (que no policíaca, ni tan siquiera criminal), pero con mayor razón diremos que es una obra espeluznante sobre lo que cierto agente comercial belga que traficaba con marfil en el Congo denominaba “el horror”.
(Ya lo he dicho: Nacemos muertos es una novela de miedo. Así de claro).
Esta obra, que se abre con el retrato de una familia clasemediera de Mazatlán, se convierte a las pocas páginas en una vorágine agobiante que no habla sobre la desesperación, sino que la muestra ante un lector atónito como servidor de ustedes. (Aún noto el zumbido en los oídos...)

Nacemos muertos: el crowdfunding
Ana Colchero se ha unido a las filas de los autores que están apostando no sólo por un sistema de producción distinto en la literatura, un sistema acorde con los tiempos que corren, opuesto (en apariencia) al sistema tradicional de “autor lleva manuscrito a editor; editor no se lo lee; editor lo publica pero no paga el adelanto o paga una miseria”.
Y es que Ana Colchero, después de trabajar con editoriales como Planeta (México), La Esfera de los Libros (El Mundo) o Suma de Letras (Santillana), ha decidido apostar por su trabajo y hacer un crowdfunding para publicar su obra más personal y desgarradora.
Y les diré que es una tramposa, porque después de haber leído Nacemos muertos, puedo decir que ha apostado sobre seguro.
Después de un breve escarceo con una plataforma de crowdfunding latina (una plataforma que ha demostrado no ser ni remotamente profesional), la señorita Colchero ha montado un crowdfunding por su cuenta y riesgo, sin respaldos de ningún tipo, sin plataformas chapuceras, y pone a disposición del público y a la voluntad de sus lectores el futuro de su nueva obra.
Sólo puedo decirles una cosa más: Apoyen este crowdfunding. Precompren Nacemos muertos. Pueden hacerlo aquí:

Y aquí pueden ver el proyecto:




Nota: Por cierto, también pueden seguir a Ana Colchero en su blog "La Cucaracha". Pinchen, pinchen el enlace...

martes, 23 de abril de 2013

ALBERTO LÓPEZ AROCA EN MARÍA PANDORA (con CHARLIE MARLOW Y LA RATA GIGANTE DE SUMATRA, ESTUDIO EN ESMERALDA Y CANDY CITY, entre otras obras...)

Esta noche estaré a las 20.30 (junto con Mike Bonales, autor de "Conejo frustrado" y "Polo Sur") en la champañería-librería (sí, existen las champañerías-librerías) MARÍA PANDORA, en la Plaza Gabriel Miró 1 (en las Vistillas, en la Latina si lo preferís).
(Todo esto, en Madrid, obviamente...)

La parte que a mí toca será hablar de estas obras (y ya puestos, venderlas y firmar ejemplares):


CHARLIE MARLOW
Y LA RATA GIGANTE DE SUMATRA 


CANDY CITY


ESTUDIO EN ESMERALDA


Tres novelas muy distintas, escritas en tres momentos muy distintos de mi vida.
Y ya que estoy, hablaré también de los crowdfundings, de mitología creativa, de Sherlock Holmes, y de lo que se ponga por montera.


VENID
La entrada es libre.
Y además de champán,
en María Pandora tienen tanta cerveza que la venden...

(Por cierto, que esta es una de esas actividades que se anuncian como "La noche de los libros". Ver este enlace del diario El País, donde aparece reseñado este sarao, entre otros muchos...)

lunes, 8 de abril de 2013

ISLA DE LA CALAVERA: Los Tres Dragones de Oro en la Isla de la Niebla


Curtis Garland’s
“Karate vs. King Kong”

Colección Doble Juego nº68, julio de 1983. Cubierta de autor desconocido (de momento)

El recientemente fallecido maestro de la novela de a duro, Juan Gallardo Muñoz (Curtis Garland, Donald Curtis, y una larga ristra de pseudónimos) no deja de sorprendernos.
Si sabíamos de primerísima mano que en su amplísima producción (más de 2.000 títulos) había pasticheado, como buen mitógrafo creativo, con Sherlock Holmes (ver Sherlock Holmes en Rancho Drácula, del presente autor), Drácula, Frankenstein, el Fantasma de la Ópera, los crímenes de la calle Morgue, Fu Manchú, el Hombre Invisible, y todo lo que se le puso por delante a este autor que merece reconocimientos y nuevas ediciones de sus obras, ahora resulta que además, se había aproximado en (al menos) una novela al lugar que servidor de ustedes ha venido en llamar la isla de la Niebla (hagan el favor de adquirir unejemplar de mi novela Charlie Marlow y la rata gigante de Sumatra, si no lo han hecho aún), y que diversos cineastas han nombrado como Skull Island, la isla del Cráneo... o de la Calavera.

Tres Dragones de Oro




Hasta donde el presente autor tiene conocimiento (y es altamente probable que se equivoque), Juan Gallardo sólo realizó una “serie de personaje” al estilo de los pulps norteamericanos de Doc Savage y La Sombra, o de los españoles El Coyote o El Pirata Negro. Se trata de la serie de los Tres Dragones de Oro, tres budokas (expertos en artes marciales, según nos cuenta Curtis Garland) con sobrados recursos económicos como para tener la vida resuelta, que se dedican a ir por el mundo desfaciendo entuertos. Se trata del algo, guapo, rubio y yanqui Frank Cole (el karateka), la mulata (o negra directamente, no me ha quedado claro) Lena Tiger (la del aikido) y un chino con aspecto de occidental, Kwan Shang (el del kung fu).
En estos momentos no disponemos del Canon de los Tres Dragones, pero sabemos que en la relación que proponemos a continuación, perteneciente a la colección ¡Kiai! de Bruguera, se encuentran todas las aventuras conocidas de nuestros héroes, más una (no sabemos cuál) que no es de la serie.
¡Kiai! (brillante nombre, vive Dios) dio comienzo en 1976, en plena época de las exploitations cinematográficas, y se prolongó durante ochenta números (suponemos que semanales, pero no lo tenemos nada claro) que escribieron, además del maestro Curtis, otros inmensos autores de bolsilibros de la época como Ralph Barby, Lou Carrigan, Clark Carrados, Burton Hare, Ray Lester y Peter McCoy.
Aquí están los títulos de ¡Kiai! escritos por Garland:

9. Tres dragones de oro
15. La máscara Kendo
19. La sombra del samurai
23. La cripta del dios de jade
30. Locura púrpura
34. Los jarrones de la muerte
36. El signo del alacrán
38. Los cruzados amarillos
43. El infierno de bambú
47. Isla de la calavera. Lou Carrigan
51. La noche de «La cobra»
55. Muerte vestida de oro
57. El jardin de los suicidas
61. El ídolo que vive
64. Aquel que dominó el mundo
68. Ajedrez de terror
70. Rosas negras para morir
74. Cinco discos de jade
78. Frío mortal

Algunos de estos títulos fueron reeditados dentro de la extrañísima colección Doble Juego, tambien de Bruguera, dedicada a relatar thrillers de ambiente deportivo. Curtis contribuyó a Doble Juego con títulos tan pintorescos como ¡Penalty! o 
París-Dakar, rally de muerte, y sus contemporáneos nos sirvieron historias que harían temblar a nuestros deportistas modernos, como Su primer tongo, de Lucky Marty; Masacre en el béisbol de Adolf Quibus, o Drogas y... ¡gol!, de Alan Parker.
Creo que los autores se lo tomaron con cierto humor...
Los títulos de los Tres Dragones de Oro reeditados en Doble Juego (en cuya nómina de escritores contó con el por entonces jovencísimo Lem Ryan, quien aprovechó su estancia en esta rara colección para realizar también su propia serie “de personaje”) son los siguientes:

61. Locura púrpura
66. Infierno de bambú
68. Isla de la calavera
71. La noche de «La cobra»
74. Cinco discos de jade
78. Ajedrez del terror

Por suerte para mí y para los aficionados a la mitología creativa en general, “Isla de la Calavera” se publicó dos veces, y es un ejemplar de Doble Juego el que ha caído en nuestras manos.
(Y por el momento, no disponemos de la portada de ¡Kiai! ¿Algún alma bondadosa que nos pueda pasar un buen escaneado o una buena fotografía, por favor?)*




*El amigo Óscar Alarcia nos ha facilitado la portada en cuestión. ¡Aquí la tenéis!




La sombra de Kong

En cuanto a Isla de la Calavera y su argumento... bien, hemos decidido no desvelar nada. O prácticamente nada.
Eso sí: diremos que la novela da comienzo en mitad de una rebelión en un país del África ecuatorial, que hay un barco mercante (se diría que un vapor volandero) comandado por un capitán holandés, que hay chicas guapas, que hay científicos locos, que hay traficantes de armas, que hay marinos rudos y malvados... y sí, está la Isla de la Calavera.
Y un simio gigante. De verdad.
Y tres héroes expertos en artes marciales que reparten jarabe de palo (ver el mítico capítulo titulado “Budokas contra Monstruos”).
Necesitáis leer esta novela.
***
Una cosa más: Garland se aproximó a un tema muy, muy, muy semejante al que se trata (o más bien, “utiliza”) en esta novelita, en otra obra, concretamente en El cráter del terror (colección Tam Tam nº64, agosto de 1983). Y no podemos dar detalles por temor a incurrir en un spoiler. Pero sí diremos que es un homenaje (abierto, abiertísimo) a The Lost World de Arthur Conan Doyle.





Y aún otra nota más: Hay otro “dragón de oro”, que sepamos, que nada (¿o sí?) tiene que ver con nuestros budokas. Es una estatuilla que aparece en El templo de los siete ídolos (Tam Tam nº88, agosto de 1984), otra historia de carácter aventurero y fantástico, protagonizada por el aviador Percy Cole (¿un pariente del karateca Frank Cole?; apostaríamos a que sí), y que se caracteriza por ser, hasta donde sabemos (esperamos vuestros apuntes para que rectifiquemos), la única novela de Juan Gallardo Muñoz donde se menciona al Maestro de Providence, H.P. Lovecraft. Y tampoco daremos detalles porque, una vez más, no queremos destrozaros el final de la historia.